En diversas zonas de la Ciudad de México, franeleros o “viene viene”, como se les conoce popularmente, causan daños a los vehículos de conductores que no les pagan por estacionarse en vía pública.
Esta especie de estacionamientos clandestinos son manejados sin ninguna clase de regulación o permiso por personas que apartan lugares en las calles con botes, postes, cajas o cualquier otro objeto que impida a los conductores aparcar libremente.
Mercados públicos, deportivos, las afueras del Bosque de Chapultepec y del Auditorio Nacional, hospitales, centros de entretenimiento y hasta cerca de edificios de gobierno son puntos en donde los franeleros acaparan el espacio de las calles para cobrar a los conductores tarifas que van de entre 10 y 100 pesos por permitirles estacionarse y “cuidar” de su vehículo.
Franeleros dan “cristalazo” a quien no paga
En redes sociales, la periodista Sofía Yañez dio a conocer un caso de agresión por parte de franeleros del que ella misma fue víctima en las cercanías del hospital Siglo XXI.
Señaló que llegó por una urgencia familiar y se estacionó en una calle en la que un sujeto le hizo señas para que pagara por el espacio. Debido a la prisa que llevaba, explicó la periodista, no tuvo oportunidad de darle dinero.
Pasó la noche junto a un familiar que se encontraba interno en oncología, al salir e ir a revisar su auto, se encontró con que tenía un “cristalazo” y que había sido víctima de robo:
“Al salir esta mañana me encontré con el cristalazo: se llevaron mi llanta de refacción, herramienta y unos lentes. El tipo, como si nada, se acercó burlón, diciendo “te dije que no me hacía responsable”. El auto además tenía la llanta picada y una cubeta de plástico abajo. Para nadie es un secreto que esta gente amenaza y actúa con impunidad en toda la CDMX. Le alcancé a tomar fotos, pero ya era demasiado exponerme”, escribió la periodista.
Luego de que su denuncia se hizo viral, las autoridades voltearon a ver el caso y este lunes 13 de junio se dio a conocer que el franelero involucrado fue detenido en las inmediaciones del hospital. También se anunció que se le hallaron 20 bolsas con hierba.
Los “viene viene” son un problema que no termina
El problema de los franleros no es exclusivo de la Ciudad de México. En casi toda la república se dan casos de personas que trabajan en este tipo de actividades y de conflictos que llegan a tener con los conductores.
En redes sociales, casi a diario, hay testimonios de personas que han sido víctimas de agresiones o insultos por negarse a pagar una cuota a franeleros por estacionarse en la vía pública.
Vecinos que viven en calles donde hay presencia de “viene viene” aseguran también en redes sociales que a pesar de que existen denuncias ante las autoridades y que se llama al 911 para pedir que los remuevan, a las pocas horas de haber sido retirados vuelven al mismo lugar son sus enseres.
